lunes, 2 de noviembre de 2015

El sepulturero (relato)


Mi cementerio es sagrado, bajo la luz del silencio el sol se bebe la siesta y hasta la luna canta bajito, para no despertar a mi gente de su silencio.
Me paso la vida cuidando a los muertos, y percibo susurros extraños, escucho murmullos o voces, tengo una capacidad innata para conectar con ellos, casi siempre pretenden ayudarme y he llegado a oír cosas como: Lo peor no es estar muerto, lo peor es estar enterrado en vida.
Hay días de viento que los árboles crujen y sus ecos me hacen pensar que algo se me escapa, discurren murmullos o susurros que conozco, y me turbo,  no tengo visión de lo que oigo, entonces aparece la frontera del pensamiento,  pasado esta, hay algo eterno.
Sumido en las profundidades pierdo la consciencia y hace que mi frágil memoria encuentre consuelo en mi familia, sobre todo en mi novia Cecilia, (la niña de mis ojos), es muy sensible y muy buena persona, destaco de ella también la  belleza de sus ojos negros, muy expresivos tan grandes como aceitunas, su tez morena, sus cabellos de oro y por encima de todo que me quiere a rabiar.
Le escribo poesías, la observo cuando las está leyendo, me mira y vuelve a mirar como a un fantasma asustadizo, se alarma por mí, de pronto guarda el poema en su pecho, me sonríe, se acerca y me da un beso.
Cuando me alejo de ella me invade la noche y recuerdo a los que se fueron sin poder amar a la persona querida.
Ayer las lágrimas volvieron al cementerio, el mar se cobró seis víctimas de un naufragio, aquello parecía un valle de lágrimas, angustioso, desolador e inesperado,  no pude evitar que me abrazaran y vertieran sus lágrimas sobre mi cara, después marcharon como sombras, llenas de dolor y  desconsuelo.
Hoy me ha contado mi novia que antes de acostarse leyó uno de mis poemas y soñó que hacía el amor en el cementerio y no era conmigo lo hacía con un muerto, pasó un miedo terrible.
Ella exagera al decirme que anoche se le heló el alma y que todo es consecuencia de mi trabajo. 
Yo le digo que los tiempos no están para perder un trabajo como el mío, al fin y al cabo lo que soy no lo aprendí en los libros, lo aprendí de los muertos,
es algo sobrenatural o es mi capacidad de médium , conecto con algunos y me revelan pensamientos y hechos. He desarrollado capacidades sensoriales, (se que cuando los entierro sus secretos quedan flotando y para llenar su eterno vacío se valen del alma viva del cementerio), “el sepulturero”,  yo se guardar la riqueza invisible de su legado y cumplo con mi palabra.

Cuando salgo del laberinto de sus profundidades pienso en mi novia y me siento tan vivo que la busco y me entrego a ella porque ella es vida y me da su amor.
Autor: Nico Pozón 30/10/2015

22 comentarios:

  1. Un tío con menos talento que yo al nacer, y se hizo imprescindible lavando cerebros, la llave del cementerio y le va muy bien robando secretos… un tio con mucha suerte los hechos cantan ….tiene una novia que le quiere y además escultural…
    Llevo unos días buscando un puesto de sepulturero … no hay un trabajo mejor remunerado (dinero y amor)
    Un saludo

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  2. Tu capacidad de invención no tiene límite, poema y relato al sepulturero para conmemorar las fechas un regalo a los que se fueron y una renovación a las ilusiones en la vida.
    Muy logrado

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  3. Le has puesto voz al silencio… una razón para leerte
    Un abrazo

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  4. Me sorprende tu relato es original, diferente y muy apropiado a la fecha. Una mezcla de lo clásico con la espiritualidad moderna.
    Huele a libertad y es entretenido
    Un saludo

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  5. SIMPLEMENTE DECIR, QUE ES COMO UN CUENTO QUE TE PONE LA PIEL DE GALLINA, HAS CONSEGUIDO RESUCITAR AL SEPULTURERO Y ESO ES SUBLIME.
    ME HAS DEJADO SIN ALIENTO
    BESOS

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  6. Tu historia es un retrato del quehacer diario del enterrador, tuve un tio dedicado a estos menesteres y nos contaba historias que me llegaban al alma y pasaba la noche en blanco.
    Mi felicitación sincera

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  7. Robarle a los muertos sus secretos me parece muy fuerte, mas que fuerte¡¡tétrico!!, este sepulturero es un caradura , muy de lo que vemos ahora.
    un vivales

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  8. Un relato muy profundo lleno de ingenio fantasía y sentimiento
    En fin; tu historia me ha encantado

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  9. Tétrico relato pero con algo de verdad, la vida de una persona dedicada a los muertos no la veo muy clara. Me gusta la personalidad de estas líneas y un placer visitar tu rincón.

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  10. Me parece que en el poema el autor hace alusión a hechos o situaciones de vida y muerte muy bien llevadas. Llorar y sonreír.
    Un fuerte abrazo

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  11. Aquí huele a muerto…
    Cecilia …. La novia del soy sepulturero

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  12. Verdades y fantasías del autor muy bien plasmado y con tul de conexión con los espíritu que mas que un sepulturero parece un conseguidor y hombre de confianza.
    Un cordial saludo

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  13. El sepulturero es un personaje muy peculiar, quizás no tanto en las ciudades como en los pueblos, especializado en su trabajo. Muy bonito como lo narras.

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  14. Tienes una gran capacidad para inventarte historias, (relatos y poemas), admiro tus letras que siempre tienen sentido y encanto.
    Un abrazo

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  15. Excelente y emotivo… hay que crear sin desmayo…
    me ha gustado mucho.

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  16. Muy interesante la historia del sepulturero y en unas fechas tan apropiadas viene muy a cuento
    Felicidades

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  17. Ser sepulturero debe estremecer cada vez que le llevan a alguien, su corazón llora.
    Me dejas sin aliento

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  18. Un lindo y triste relato con mucha fuerza narrativa.
    Un placer leerte

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  19. Una historia muy linda ... a mi me gustan los cementerios y su sílencio.
    Un saludo

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  20. Muy conseguida la historia del sepulturero.
    Un abrazo

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  21. Hay sepultureros de pueblo dedicado en cuerpo y alma al cementerio.
    Me gusta leerte

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  22. Una cronica de una vida entre los muertos....con mucho romanticismo.
    Un saludo

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