viernes, 16 de mayo de 2014

Corazón rebelde


Salí a pasear pero no como un día cualquiera, hoy me lo pedía el corazón. Se estaba aburriendo y cuando lo hace es peligroso llevarle la contraria, me gusta darle pequeños caprichos así lo mantengo en forma.

Un galope melodioso me hizo sentir que estaba enfadado, respiré profundamente al tomar contacto con el campo, noté que ese día quería marcha y que el cuerpo no estaba por la labor, no le seguía el ritmo, el frescor del amanecer acariciaba mi cara y la luna llena se resistía a marcharse.

De repente el silencio me atrapó, perdí el control de la situación e irrumpió en mí el desvanecimiento, trate de mantener la calma y esperé:

Los nervios invadieron mi cuerpo con histéricos sonidos, inundándome como un torrente sin control hasta perder el aliento.

Todo a mí alrededor es campo yermo, mis gritos resuenan con fuerza en agónico eco.

¿Estaba a punto de morir?, ¿O era el pánico el que me atormentaba?

El tiempo pasa volando, aunque yo nunca lo veré. Sentía el corazón del viento, latir en mi corazón y miles de sentimientos sucumbir a la excitación.

Abrí las ventanas a los recuerdos de los seres queridos que me adelantaron en el viaje y a los que seguían allí conmigo, anunciando mi despedida.

Miles de sombras van cubriendo los espacios azules que en el cielo iban quedando, había llegado el momento de dejarlo todo, busque detrás de cada sombra y encontré una luz difusa que venía hacia mí, era mi rayo de luz.

Nico 12.05.2014

10 comentarios:

  1. Por la forma que te expresas vivo lo que escribes, sacas los sentimientos a pasear describiendo de una forma magistral el momento de la muerte.
    Te ha quedado muy bien y he disfrutado aunque con mucha ansiedad.
    Un gran beso

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  2. Julio de las Heras16 de mayo de 2014, 19:16

    Relato apasionante y de gran belleza descriptiva narras el infarto de una forma ejemplar con genialidad y entereza.
    Un abrazo

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  3. Tienes tu propia forma de narrar historias, confieso que la que nos cuenta la he vivido en mis propias carnes y no quiero ver sufrir a nadie como yo lo hice.
    Felicidades porque das en el clavo y admiro tu valía de comunicador.
    Feliz fin de semana

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  4. Nos haces vibrar con una tensión apasionante donde reflejas todos los detalles que conducen a la embolia. Espléndido
    Te dejo un abrazo

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  5. Tu relato da pié para decir ... "Que bello es vivir" . La vida merece erguirse en vertical mas allá de las caídas.
    Muy emocionante tu relato hasta el último aliento.

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  6. La vida entera consta de pequeños momentos de felicidad que unidos consiguen ofrecernos una existencia inolvidable. No conviene relajarnos y avisos que se producen en nuestro cuerpo y nos parecen insignificante hay que considerarlos y sobre todo escuchar los latidos de nuestro corazón que nos marca el paso a seguir antes de emprender un angustioso viaje… “Cuidémoslo”… El corazón es muy sabio, igual que el autor del relato.
    Besos
    Mónica

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  7. Magnifico relato de una muerte anunciada, de pronto te encuentras en medio de la nada, buscas a los tuyos y no los encuentras lo que si ves es el último rayo de luz que te muestra el camino del más allá.
    Saludos

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  8. Se queda una atrapada con tu agónico relato, pero de todo se aprende aunque quisiera saber que te pasa por la mente en esos momentos y si ves el final ¿Qué piensas? ¿Qué frase le dedicarías al último adiós?
    Que tengas un buen día y que tus sueños se cumplan
    Besos

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  9. La foto que acompaña al relato preciosa y el relato magnífico.
    Me atrapa las sensaciones que produce el discurrir del infarto y también llegué a encontrar esa luz difusa que venía hacia mí y conseguí ver a mi rayo de luz.

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  10. Un relato corto muy bien llevado donde destacas que somos muy frágil y cualquier contratiempo puede acabar con nuestra vida....pura realidad no hay que abusar de nuestro cuerpo debemos dejarnos llevar por lo que nos pida y disfrutar de los pequeños momentos con amigos y familiares.
    Un saludo

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