La
aurora ilumina el cielo,
Al
despuntar la mañana,
La
cigüeña y sus polluelos,
Repicando
las campanas.
Los
graznidos los delatan,
En
lo alto del campanario
Descansan
sobre una pata,
Cuando
rezan el rosario.
Tiene
aurea de ser fiel,
Fidelidad
a su nido,
Cuando
surge la ocasión,
A
su nido otro querido.
Ya
criados sus polluelos,
Inician
cursos de vuelo,
Que sientan la libertad,
Como
las olas del mar.
¡Cuidado,
fuertes vientos!
El
raudal asoma,
Un
polluelo, del campanario,
Se
desploma.
Con
las alas desplegadas,
Suspendidos
en el aire,
A
lo más alto del cielo,
Con
arrojo y con donaire.
Buscan
iglesia y cura,
Un
nido en el campanario,
Para
iniciar la aventura,
Ya
han salido del armario.
Copyright © 16/2012/11609
Las cigüenas anuncian la buena nueva, y tu nos trae otra bonita poesía, que las fuerzas no te flaqueen.
ResponderEliminarPoesía dedicada aún querido y bonito animal, como es la Cigüeña que cubre las alturas de nuestras torres.
ResponderEliminarLa cigüeña el elegante pájaro que anuncia que empieza el buen tiempo y puebla los campanario y torres más altas.
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