domingo, 3 de febrero de 2013

Interferencias

Burla, burlando….
Hoy que vivimos en una sociedad triste y corrompida donde triunfa el más canalla y el resto contemplamos atónitos la tragedia que nos ha tocado en suerte, la sensación de impotencia que te bloquea no solo los sentimientos, sino la propia razón. Vamos a tratar de alegrar un poco el ambiente y escribir algo que nos haga reír, una historia breve y jocosa que está a la orden del día. “El acoso diario que nos someten las compañías telefónicas”.

Interferencias
Con pereza, y con desgana,
Me levanto esta mañana,
Me sobresalta un zumbido,
Al teléfono, me llaman,
La voz suena muy lejana.
Me ofrece un cambio,
¿Qué cambio?,
¡De compañía!
Le tiene odio a la mía,
O tengo otras opciones,
No, ¡qué va!, son decisiones,
Que toma la compañía,
Para que se ponga al día,
Con las comunicaciones,
No me toque los…talones,
Pero hombre, entre en razones,
Una mañana tan fría,
Me“cagüen” en su compañía,
Y en todas sus pretensiones,
Y no me vuelva a llamar
Soy funcionario en prisiones.
¡Y yo soy tu Gregoria!,
Me tienes que perdonar,
No hay sentencia absolutoria,
¡Pues las bromas, bromas son!
No reconocí tu voz,
¡Grábatela en la memoria!,
Lo hablamos de puertas adentro,
Ya a solas en su aposento,
A Gregoria le suplicaba,
Que todo había sido un cuento,
Del cual ya no se acordaba.
¡Piénsalo bien! le decía,
Y te vendrá a la memoria,
Y al tiempo que le venía,
También le vino a Gregoria.

 

3 comentarios:

  1. Como la vida misma. Hay que tomárselo a broma.

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  2. Ni que decir de este exquisito poema es como la vida misma.
    Muy acertado
    Felicidades

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